Morelia, Michoacán. 15 de octubre 2019.
Palabras del gobernador Silvano Aureoles Conejo.
El día de ayer Michoacán fue testigo de uno de los actos más cobardes e inhumanos que la delincuencia organizada ha cometido en contra de personas, que todos los días cumplen con la noble misión de proteger a la sociedad.
Quienes perpetraron el acto vil y cruel de matar cobardemente a 13 de nuestros policías, merecen el repudio entero de toda la sociedad mexicana y la intervención de todo el Estado Mexicano.
A nadie debe quedarle duda que atacar cobardemente a elementos en servicio, que ni siquiera estaban realizando tareas operativas, sino que cumplían un mandato judicial, es una de las expresiones más grandes de la miseria humana de algunas mentes enfermas.
Como país debemos entender muy bien que lo que sucedió ayer en Michoacán, no se trató de un acto común.
Detrás de ello, hay bandas delincuenciales, organizadas, que operan nacionalmente, y que desde hace años buscan replegar y someter a la sociedad en su conjunto.
En este sentido, es fundamental que trabajemos juntos los tres órdenes de Gobierno, para que no haya impunidad, se aplique la ley y se haga justicia.
No debe haber dudas, México se enfrenta ante delincuentes que están en el último escalón de la condición humana, seres cobardes, que son enemigos de la sociedad.
Por eso, hoy más que nunca, el Estado Mexicano debe intervenir sin titubeos, sin reparto de culpas, con altura de miras, con trabajo conjunto, para atender la principal demanda de nuestro país que es la seguridad.
Soy enfático, Federación, Estado y Municipios, en conjunto, debemos cerrarles el paso a estos criminales, que lastimaron a gente buena, a gente con familia, a gente que todos los días salía a trabajar dignamente, y se la jugaba por un Michoacán y un país mejor.
Hago un llamado atento y respetuoso al Presidente de la República, Lic. Andrés Manuel López Obrador, para enfrentar juntos, con toda determinación, este atentado que es una afrenta hacia el Estado Mexicano.
Señor Presidente cuenta con nosotros, con toda nuestra disposición, con el gobierno de Michoacán dolido, agredido pero totalmente de pie para seguir adelante con todo.
Estamos listos para entrarle y hacer la parte que nos corresponde, pero los Estados y Municipios necesitamos que desde la Federación se apriete el paso, que se fortalezcan las acciones contra la delincuencia organizada, que nos siga respaldando nuestro Ejército, la Marina, la Guardia Nacional, así como la Fiscalía General de la República.
Sabemos que lo ocurrido en Michoacán, ha sucedido y puede repetirse en otros Estados, porque estamos frente a grupos que se atreven a desafiarnos como país. No podemos permitirlo porque esa es la razón de ser, de nuestras instituciones y del estado mismo.
Por ello, aunado al esfuerzo para construir la paz, debemos entrarle con toda la determinación para que este tipo de agresiones y delitos del crimen organizado, se topen con la fuerza de la ley y las instituciones, que se topen y se encuentren con toda la fuerza del estado nacional.
Nos lastima mucho que quienes defienden y dan la cara por la seguridad de las y los michoacanos, hayan sido víctimas de la cobardía de quienes se esconden en el anonimato de la violencia y quienes cometen estos delitos arteros y miserables.
A las familias de los michoacanos, mexicanos, que perdieron la vida en el municipio de Aguililla, les digo y me comprometo a trabajar en absoluta coordinación con el Gobierno Federal, la Fiscalía General de la República y la Fiscalía General del Estado, para que este atentado no quede impune. No va a quedar impune.
Mi más sentido pésame a sus madres y padres, a sus esposas, hijos y hermanos; sepan que todo el Gobierno de Michoacán los acompaña en su dolor, y no los vamos a dejar solos.
Yo estoy con ustedes en este dolor tan grande y los voy a acompañar para salir adelante.
Tengan la seguridad de que personalmente, me voy a ocupar para que Ustedes puedan tener lo necesario, para que sin olvidar el sacrificio de sus seres queridos, puedan salir adelante, y que juntos se supere esta circunstancia, que nos lastima a todos.
Que quede bien claro y que se escuche bien: Michoacán no es la vileza que ayer atestiguamos.
Somos un estado de gente buena, de gente hospitalaria y trabajadora, somos más, inmensamente más, los que queremos un Michoacán y un México en paz y en tranquilidad.
No permitiremos que la sociedad michoacana y mexicana se convierta en rehén de unos pocos que pretenden someter a la mayoría, sólo por defender sus mezquinas y perversas actividades.
Esos pocos que ayer cruzaron esa delicada línea, lastiman, ofenden y atentan contra toda la sociedad.
A todas y todos los elementos en activo de la Policía Michoacán quiero decirles que, al igual que sus compañeros caídos, el Gobierno que encabezo estará siempre con Ustedes y sus familias, siéntanse absolutamente respaldados.
No vamos a permitir que este acto no reciba reparación o justicia, porque quien los agrede a Ustedes, agrede a todo Michoacán y agrede a todo México.
Reitero el llamado a todos y todas, a la sociedad michoacana y mexicana. México es un gran país y no permitiremos que unos cuantos nos vulneren, pisoteen y nos hagan presos de sus condenados actos e intereses.
Convoco a la sociedad michoacana, a la sociedad mexicana, al repudio total a estos delincuentes, condenemos estos actos, vayamos por ellos, que no nos roben el derecho a vivir en la paz y tranquilidad a la que aspiramos todos.
A mis amigos de los medios de comunicación, les pido que nos ayuden, que le cerremos el paso a cualquier otro interes, que no hagamos apología del crimen.
Michoacán y México necesita que todos cerremos filas, porque la fuerza del Estado mexicano somos todos y siempre será superior que el interés mezquino de unos cuantos.
